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"No es puro cuento, realmente todo el camino y el conocimiento valioso que me ha traído hasta aquí, lo encontré a un par de clicks"
Esta historia es una recopilación de las experiencias y los caminos significativos en mi vida, es un resumen del camino que me ha llevado desde 0, hasta donde me encuentro en la actualidad; esta es mi historia de origen.
“Antes de continuar, te quiero decir que este contenido probablemente no funcione para hacer crecer tu negocio de manera directa, pero sí, para conocer una potente estructura de Storytelling (Contar historias), que puedas utilizar, aplicar y sacarle provecho para apalancar tus proyectos.”
1. Mis inicios en el mundo de los negocios
Todo este rollo empezó hace unos 6 años mal contados, para esas épocas yo era un simple padre joven, con mucho potencial, pero bastante frustrado; me encontraba empleado en una empresa familiar y estaba dando mis primeros pasos como un brillante estudiante de Negocios Internacionales.
Afortunadamente mi ambición por aprender cada día algo nuevo, me dio un buen nivel de consciencia y me abrió los ojos a las realidades del mundo; me di cuenta, de que mis sueños, mis aspiraciones y mis metas difícilmente podrían ser alcanzados en el camino que estaba siguiendo.
Creo que lo primero que despertó mi deseo emprendedor, fue el hecho de estar haciendo tareas que detestaba para que me pagaran una miseria, mientras veía que otras personas podían vivir mejor, haciendo lo que aman y siguiendo su propósito de vida al impactar a otras personas.
Me lo tomé personal…
Decidí crear mi primera empresa (formal) junto a mi madre, fue una cagada gigantesca, pero nos ayudó mucho; empecé vendiendo lo que podía.
Construimos una empresa de suministros químicos de aseo para conjuntos y centros comerciales, también instalaciones de CCTV y otras tecnologías similares, de las que hacía en mi anterior trabajo, rescaté lo que me gustó en algun momento, yo siempre fui un chico tecnológico…
Mi plan en ese entonces, era bastante simple y estúpido, todos mis ahorros, mi liquidación, mis ingresos y cualquier otro ingreso, iban directamente a mis costos vitales y mis gastos personales; con la esperanza de crecer y seguir estudiando la carrera de negocios internacionales, que de alguna manera me llevaría al éxito profesional.
Jajajaja, era bastante optimista, ingenuo y arriesgado, justo como me dijo un gran amigo y mentor: “Tenía fórmula ideal para el fracaso”.

Pero bueno, a pesar de todo, mis intenciones no eran malas, digo, yo quería ser capaz de mantener y darle todo a mi familia por mi propia cuenta, así, todos podríamos disfrutar completamente la vida, viajar por el mundo y vivir con abundancia y prosperidad.
Esto no sería tan fácil, me topé con muchísimas dificultades en el camino…
En primer lugar, yo no sabía nada de emprendimiento, marketing, ventas y de ahí en adelante, y rara vez me salía un negocio, de hecho, eran más los días en los que perdía dinero, esto no me permitía ayudar a mi familia de la manera en que yo deseaba.
La presión aumentaba porque mi hija venía en camino al mundo y la familia se haría más numerosa, y tras del hecho, estaba atrapado en una relación ultra tóxica.
Y en segundo lugar, mi familia me estaba ayudando el doble a mí, se supone que yo era el hombre de la casa, pero ellos aveces terminaban cubriendo las cuentas que no podía pagar por mí mismo; y en cambio, yo solamente iba a la universidad, hacia uno que otro trabajo y desperdiciaba mí tiempo libre en videojuegos.
Me sentía como un rotundo FRACASO.
2. Mi camino
El problema, era nada más y nada menos, que yo no sabía absolutamente nada de negocios, tenía una pésima gestión de mis finanzas, el marketing y las ventas del negocio, no había nada de planeación, de objetivos, de metas o estrategia alguna, era simplemente lanzarme al mundo, y de alguna manera sobrevivir y salir adelante.
Cumpliendo el pronóstico inevitable, en 7 meses quebré, se acabó mi colchón financiero y empecé a pedir préstamos bancarios y personales, y para ser sincero, tampoco estaba 100% feliz con lo que hacía para ganar dinero.
Seguí estudiando e investigando arduamente, profundicé mucho en la globalización, la tecnología y los negocios, en el marketing digital, descubrí la combinación perfecta de estas áreas, un gran potencial para el crecimiento de los negocios en la actualidad y algo que no me gustaba hacer.
Y en algún punto, empecé a conocer personas, que habían construido sus propios negocios, proyectos, iniciativas y emprendimientos de gran impacto: y además estaban logrando ayudar a otras personas en el camino.

Ahí comprendí que esto no se trataba simplemente de construir una empresa tradicional, vender mucho y generar una utilidad, eso ya no es suficiente para lo que demanda el mundo de hoy, y tampoco iba con mi estilo.
En el mundo de hoy, debes asegurarte de construir un negocio Genuino, Exitoso y Digital.
Seguí mi camino emprendedor con cada vez menos tiempo disponible, cambié mis prioridades y empecé a aprender y a aplicar marketing digital en los negocios.
Después de un tiempo cultivando esta habilidad, y con el conocimiento mínimo necesario, me lancé al mercado a ofrecer servicios de agencia a otras empresas, y conseguí mis primeros clientes genuinos bajo este modelo de negocio.
Estaba vendiendo servicios 3 a 5 veces más grandes que antes, y me esforzaba la mitad, tenía unos buenos márgenes de ganancias y me sentía más satisfecho que antes, pero no del todo.
En ese momento me di cuenta, de que una de las mejores maneras de emprender, es un con un negocio de servicios, de base digital y que esté alineado con tu esencia de vida.
Mi plan inicial era sencillo, crear una agencia de marketing digital, que estuviese potenciada con herramientas de Inteligencia Artificial para lograr mejores resultados y tener menos errores humanos; empecé a crear y vender servicios a la medida, y a trabajar con cualquier emprendedor y proyecto que llegara en busca de un impulso en el mundo digital.
Fué una decisión dificil, pero al final gasté mis últimos recursos para ingresar a unos programas de incubación de emprendimiento, algo así como reemplazar la carrera universitaria que llevaba recorrida, me olvidé de los negocios internacionales y dediqué mi enfoque 100% en los negocios digitales.
Hoy en día, van muy de la mano…

Al empezar en este camino, como emprendedor suicida, me encontraba solo, estaba completamente desnudo en una cancha completamente nueva para mí;
se me dificultaba encontrar personas con las que hablar y crecer, también encontrar clientes potenciales, y en ese entonces, nadie aceptaba mis propuestas de servicios.
Mi tiempo y mi rutina se trataba de estudiar, criar a mis hijos y construir mi negocio, pero cada segundo perdía dinero; luego de unos meses en el valle de la muerte, quedé al borde de la quiebra y estaba considerando emplearme de nuevo.
Al seguir persistiendo en mi camino y evolucionando como persona, me empecé a rodear de más personas con gran potencial, mi red de contactos se volvió más valiosa, empecé a obtener más energía y mejores resultados.
El trabajo con coaches, expertos y mentores, dio un buen efecto, y pude empezar a vender en marcha, empecé a formar la agencia de marketing digital que tenía en mis sueños y junto a un increíble equipo de personas pudimos trabajar en unos 15 proyectos.
Sin embargo, las ganancias, mi experiencia en manejo de proyectos y la gestión global del negocio, aún no eran suficientes para el éxito, nuestros proyectos se demoraban mucho en ser entregados con satisfacción y no todos los clientes resultaban felices; realmente era muy difícil encontrar un caso de éxito ideal y no siempre cobrábamos lo suficiente para que valiera la pena.
Esta última etapa resultó en una de las peores rachas, había terminado la relación con mi ex-pareja en una gigantesca discusión, mi mejor amigo canino y compañero de vida había fallecido y la salud de mis abuelos se complicaba cada día más…

Me frustré tanto que caí en un vacío de inseguridad tremenda, cerré la promoción de la agencia y luego las operaciones que teníamos pendientes para entregar todo sin problemas, me tomé un tiempo de introspección.
Decidí reenfocar mis esfuerzos y ponerle atención a lo que me estaban pidiendo los gerentes y dueños de negocios con las estrategias de sus proyectos (Acompañamiento y consultoría)
Pensaba en que hacer posible que estas personas supieran genuinamente lo que deberían hacer con su negocio para despegar en el mundo digital, podrían mejorar sus resultados y conseguir un mejor crecimiento, y yo, estaría tremendamente feliz si eso pasara.
